Otras formas de entender el coleccionismo. Alejandro Bethencourt  

Alejandro Bethencourt es pianista de profesión y amante del arte por vocación, procedente de una familia de artistas, desde pequeño ha estado en contacto directo con la obra de arte y con el tiempo esta afición se ha convertido en el motor de su vida, cargando a sus espaldas ya con una basta colección de arte contemporáneo. 

Aunque adquirió su primer cuadro solo por dar color a la pared blanca donde apoyaba su piano, esto despertó en él un cierto interés por elaborar una colección y cada vez adquiriendo más producción hasta el punto en el que frente a la sociedad ha sido catalogado con el rol de “coleccionista” sin él realmente pretender serlo, al realmente compra arte por puro amor y hedonismo, es por eso que siempre antes de comprar nada, es imprescindible conocer al artista y hacerse su amigo, porque cuando compras una obra estás comprando una parte de quien la ha hecho, al mismo tiempo, el lado negativo de ser “coleccionista” es que el amante del arte visita muchas exposiciones y llegado el momento de comprar,  siendo que uno no es rico, no hay más remedio que seleccionar y descartar, aunque no buscando la firma, ni el prestigio del autor, sino las obras que le llama la atención y con las que puede establecer un diálogo.

A Alejandro Bethencourt, la experiencia y el mercado le han hecho aprender a seleccionar qué es lo que le realmente busca en una obra de arte, entendiendo a la obra de arte sublime de una manera muy visceral como aquella que le habla y le emociona,  buscando cada vez más, una producción determinada y coherente dentro de su colección, para disfrutar al máximo de cada obra individual.